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sábado, 12 de mayo de 2012

Mejores y peores países para ser Mamá





La maternidad tiene también su ranking internacional.

Níger desplazó a Afganistán como el peor lugar del mundo para ser madre, en gran parte a causa del hambre, según el informe anual de la organización Save the Children divulgado este martes en Estados Unidos.

En contraste, Noruega es el mejor país para la maternidad, de acuerdo con la clasificación 'Mejores y peores lugares para ser mamá', que compara 165 países en términos de salud materna, educación, situación económica, salud infantil y nutrición.

El informe, del  año 2012 se centra en la nutrición, sobre todo desde el momento en que una mujer queda embarazada hasta que su hijo tiene dos años, dijo que la desnutrición es la causa subyacente de los 2,6 millones de muertes infantiles en todo el mundo cada año.
"Millones de niños más sobreviven, pero sufren toda su vida deterioro físico y cognitivo, ya que temprano en sus vidas no recibieron los nutrientes que necesitaban cuando crecían sus cuerpos y sus mentes lo que los deja más vulnerables", señaló el informe.

Después de Níger, los siguientes peores países para ser madre son Afganistán -en el primer puesto durante dos años- Yemen, Guinea-Bissau, Malí, Eritrea, Chad, Sudán, Sudán del Sur y República Democrática del Congo. Casi todos estos países se encuentran en medio de una crisis alimentaria y condiciones de desfavorabilidad no tomadas en cuenta por los estados.

En cambio  Noruega encabeza el lugar más óptimo para ser madre, les siguen  Islandia, Suecia, Nueva Zelanda, Dinamarca, Finlandia, Australia, Bélgica, Irlanda, Holanda y Reino Unido. España ocupa el decimosexto lugar, bajando cuatro puestos respecto al año pasado, por debajo de Francia y Portugal y por encima de Estonia y Suiza.

Estados Unidos ocupa el puesto 25, en alza del lugar 31 el año 2011, pero todavía por debajo de las naciones más ricas."Una mujer en Estados Unidos tiene más de siete veces  de probabilidades de morir por una causa relacionada con el embarazo que una mujer en Italia o Irlanda", dijo Carolyn Miles, presidente y directora ejecutiva de Save the Children. Y "Cuanto se trata del número de niños inscriptos en educación preescolar o de la condición de las mujeres, Estados Unidos también se sitúa entre los 10 últimos países del mundo desarrollado".

Seguramente los recortes en salud pública que se estan viendo tanto en Europa Occidental como en los EE UU, empeorarán estos datos, ya que las mujeres con mayor nivel de vulnerabilidad socio-económica dependen de la asistencia estatal, que por estos días se esta recortando con miras sólo económicas, sin tener en cuenta que los Estados deben velar por la salud de su gente.

Apoyar a las madres a amamantar podría salvar la vida de un millón de niños al año, de acuerdo con el informe, que añade que menos del 40% de los lactantes en los países en desarrollo reciben leche materna exclusivamente. En otros países se implementan planes de complementariedad,  por ejemplo en Cuba se provee de leche a los niños hasta los 5 años.
El grupo instó al Grupo de los Ocho (G8), integrado por los países con las economías más grandes del mundo, a ofrecer "compromisos audaces para hacer frente a la crisis global oculta de la desnutrición crónica", y pidió a todos los gobiernos a hacer de la lucha contra la desnutrición una prioridad.

El problema es que como otros temas, éste no debe ser tomado como un gasto, sino como inversión, y cada gobierno deberá asumir esa responsabilidad en primera instancia, no despreciando la ayuda externa,  pero será difícil que otros Estados se preocupen por la salud materna, la desnutrición, la mortandad infantil de otros. 

En la Argentina se pusieron en implementación dos planes importantes relacionados con el tema: LA ASIGNACIÓN UNIVERSAL POR HIJO, Y EL SUBSIDIO A MUJERES EMBARAZADAS. A pesar del debate y las críticas que se producen dentro de nuestra sociedad, nadie puede estar filosóficamente en contra de ambos programas que trabajan para erradicar esos problemas presentados en gran parte del Tercer Mundo, porque no nos olvidemos que la situación en gran parte de Latinoamérica no es muy distinta a la situación planteada en Africa.

En el caso de la asignación universal asignada en Argentina,  pone como condición la asistencia a la escuela, el cumplimiento del calendario de vacunación y una serie de observaciones sanitarias relacionados entre otros al registro de talla y peso, a fin de controlar el desarrollo y  la nutrición de los niños. Y en relación al subsidio de embarazadas ha logrado que muchas mujeres mejoren su nutrición, se realicen los controles necesarios, que antes no eran obligatorios y por eso muchas veces se eludian. Sin duda ambos programas pondrán a la Argentina en un mejor posesionamiento al respecto, disminuyendo las cifras de muertes maternas, embarazos prematuros, mortalidad infantil, etc.


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